Es evidente que, durante 2021, las empresas rentables se definirán por el nivel de inversión medioambiental, social y de gobernanza (ASG) y por cómo esto configurará sus estrategias y sus operaciones en general. La inversión en ASG se basa en calificaciones independientes que ayudan a evaluar el comportamiento y las políticas de una empresa en materia medioambiental, social y de gobernanza.
Sin embargo, lo que hay que destacar es la profundidad del compromiso y la implicación que debe desarrollarse por parte de las organizaciones para que permitan que las cuestiones ASG influyan en sus decisiones estratégicas y de gestión.
El ecosistema de elaboración de informes sostenibles y ASG evoluciona rápidamente y está compuesto por un número cada vez mayor de marcos, normas y proveedores.
Las políticas sostenibles y las calificaciones ASG pueden ser un recurso importante para que los inversores interpreten y comparen la información. Asegurarse de que sus opciones de inversión están en consonancia con sus prioridades es una de las razones para optar por la inversión ASG. Pero además de ayudar a luchar contra el cambio climático y la injusticia social, una estrategia de inversión sostenible y ASG también puede ofrecer mayores rendimientos.
Una de las mejores acciones que puede emprender una empresa es educar y formar sobre sostenibilidad y cuestiones ASG, sobre cómo identificar y evaluar a las partes interesadas y, a continuación, priorizar las cuestiones materiales. La formación es el primer paso de un proceso iterativo.
En Centro para la Sostenibilidad y la Excelencia (CSE) y su plataforma de formación en línea de Academia de Sostenibilidad se comprometen a proporcionar los conocimientos más recientes y actualizados en la materia. Además, CSE es actualmente la única organización de formación en Norteamérica que ofrece material de formación proporcionado por SASB.
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